jueves, 23 de junio de 2016

NO CONOCÍA PASTOR

NO CONOCIA PASTOR                                   
No conocía pastor
ni había perro que te ladre
apartado de la madre
sin lamidos ni calor.

Aunque buscando, no encuentres
aquella teta amamantarte
ni tu madre acariciarte
sus baladas no las sientes.

Una mano en tu mejilla
y los dedos vas buscando
encuentras y vas chupando
creyendo que es la tetilla.

El paisaje lo haces bello
como un perro tras su amo
no hay nada que te una a la mano
y con un cascabel en el cuello.

Entre paredes y matorrales
 el huerto es profanado
y tu estómago enyerbado
de plantas de los bancales.

Agudizas los sentidos
sientes del rebaño baladas
pero están muy alejadas
cuando llega a tus oídos.

Ibas creciendo y creciendo
y siempre jugueteando
en el cuerpo restregando
y la ropa ibas lamiendo.

En el corral encerrado
y en tu balar no hay gemido
eres fuerte y bien comido
y tus juegos por el prado.

Tu muerte un día llegó
lagrimas rodó aquel niño
no comeré de ese aliño
y el hambre se lo negó.

Cuando murió aquel cordero
se alegraron los berzales
mis ojos son humedales
y mi cara un lastimero.
                                    

  JUAN GARCÍA INES

No hay comentarios:

Publicar un comentario