EL CHAPARRAL DE OLMILLOS
SORIA
El jadeo se me estira
para llegar a tu llano
hojarascas en mi mano
mi corazón se desboca
tu vaho saborea mi boca
de ese encinar soy amante
por tu arenal caminante
me impulsan fuerza, tus olores
en esa primavera con flores
mi piel vuestro aliento respira.
Hace
siglos engendradas
esas inmensas encinas
calentabas las cocinas
cuando el hacha te cortaba
y al hogar se te arrastraba
a que calentaras la lumbre
gatea el humo a tu cumbre
las manos como retozan
de tu calor ellas gozan
¿Cuántas encinas quemadas?
Terreno arenoso y seco,
legas savia a ese encinar
en sombrando ese
lugar
con tus enormes faldones
las aves suenan
canciones
en sus ramas el nido insertan
de ese entorno no desertan
y pasea el viento su recreo
aunque suena no le veo
cabalga ondulado en su eco.
Tenéis en el tronco iniciales
con letras de vuestro dueño
en protegeros pongo empeño
porque sois un gran legado
que no vuelva
aquel pasado
de hace años no mucho tiempo
que no haya consentimiento
para matar lo que amamos
sea herencia de los humanos
y albergue de irracionales.
JUAN
GARCIA INES
No hay comentarios:
Publicar un comentario