LA MARIPOSA
Era una crisálida en una hoja,
eran duros filamentos,
una larva se escondía,
iba creciendo allí adentro.
Tanto crecía y crecía,
que el envoltorio se iba rompiendo,
una oruga iba asomando,
era una mariposa naciendo.
Era su metamorfosis,
para ella era funesto,
en una gota de rocio se vio reflejada,
se vio fea y detesto su nacimiento.
Un pajarillo la vio llorar,
le dio pena su lagrimeo,
comérsela ya no podía,
y razono su pensamiento.
¡¡Pregunto a la mariposa!!
¿Por qué tanto desconsuelo?
Porque me siento muy fea,
y ser así es un tormento.
El pajarillo se arranco una pluma,
y él se hizo un juramento,
mezclo hierbas y muchas flores,
y con ello hizo un ungüento.
Pondré a esta mariposa guapa,
mojo su pluma en el pigmento,
¡¡Pintaré lo que tú quieras!!
Píntame la naturaleza que veo,
Verde como la al baca,
como la Marieta puntos negros,
amarillo como el limón maduro,
azul como el océano.
Y los colores del arco iris,
que hermosa te estoy poniendo,
y tus antenas pintaré,
de color rojo de fuego.
Entre hojas, una flor,
con su espiritrompa iba absorbiendo,
el néctar de aquella flor,
que introducía en su adentro.
Iba tan deslumbrante y ensimismada,
en su vuelo una araña la tendió el sombrero,
y atrapada allí quedo,
pues caíste en la red.
debido a tu ¡¡ENDIOSAMIENTO!!
JUAN GARCÍA INES
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